Ingresos récord por fiscalización: Hacienda aprieta la soga a los contribuyentes

En el último año de la presente administración, el gobierno federal ha alcanzado niveles históricos en ingresos por actos de fiscalización, convirtiéndose en una pieza clave para mantener la estabilidad financiera ante la ausencia de una reforma fiscal.

Según datos de la Secretaría de Hacienda, en el primer trimestre del año, el fisco obtuvo 232 mil 503 millones de pesos por auditorías del SAT, marcando un incremento del 24.6% respecto al año anterior.

Este aumento considerable en los ingresos por fiscalización no solo refleja una mayor presión sobre los contribuyentes, sino también la efectividad de las medidas implementadas por el Servicio de Administración Tributaria (SAT) para combatir la evasión fiscal y aumentar la recaudación.

La política de no condonar impuestos, adoptada por la administración actual, ha contribuido significativamente a este incremento, eliminando prácticas de perdón fiscal que se daban en sexenios anteriores.

Además, el SAT ha aprovechado herramientas tecnológicas avanzadas, como la inteligencia artificial, para mejorar la clasificación de los contribuyentes y detectar posibles irregularidades con mayor precisión.

Estas estrategias han permitido al fisco recaudar 201.6 pesos por cada peso destinado a auditar a los contribuyentes, alcanzando así un nivel récord de rentabilidad en la fiscalización.

Sin embargo, a pesar de los éxitos obtenidos en la recaudación por medio de auditorías, algunos expertos señalan que estas medidas pueden no ser suficientes para compensar la caída en los ingresos petroleros y satisfacer las crecientes demandas de gasto público en áreas como pensiones, programas sociales y obras de infraestructura.

Para garantizar la sostenibilidad de los ingresos públicos a largo plazo, será necesaria una reforma tributaria integral que aborde los desafíos estructurales del sistema fiscal mexicano.