Al “rompecabezas” de Francisco, gobernador de Tamaulipas, sólo le falta una pieza, la UAT

Ciudad Victoria, Tamaulipas.- El que tiene el poder, debe ejercerlo o cederlo. Y es precisamente lo que está haciendo el gobernador de Tamaulipas, intensificando los vientos de cambio, tomando el control del estado, irónicamente, desde la cabeza.

Uno de los casos es el Congreso del Estado, con una transición inmediata y sin trastorno, pues los tiempos de la sucesión de poderes son muy claros. Siendo Carlos Alberto García González un hombre del gobernador Francisco Cabeza de Vaca, se vuelve uno de los pilares para una buena gobernabilidad en el rubro legislativo.

Otra posición clave es la de la Auditoría Superior del Estado, puesto ostentado hasta la semana pasada por Miguel Salmán Álvarez, quien tenía “garantizado” su lugar hasta el mes de abril del 2018. Su separación del cargo fue de manera voluntaria, cosa que no se cuestiona, pero interesante sería saber sus razones.

Recordemos que la Auditoría Superior es la responsable, entre otras cosas, de perseguir o indultar a los alcaldes que hacen mal uso de los recursos en sus municipios, ni más ni menos.

Dentro del Poder Judicial, se anunció la “renuncia” del magistrado Hernán de la Garza, quien permanecería en el cargo hasta el año 2019. En su lugar, Horacio Ortiz, quien fue elegido como nuevo presidente de este órgano.

Y así fue que erraron todos aquellos que creían que le temblaría la mano al gobernador para la toma de decisiones políticas transversales. Porque no hay que ser un erudito para comprender que mientras más aliados tenga en las áreas legislativa, fiscal y judicial, menos complicado será planear y aprobar las estrategias necesarias para sacar adelante al Estado.

Al rompecabezas del gobernador, otra ironía, le hace falta sólo una pieza más, la Universidad Autónoma de Tamaulipas. En donde más temprano que tarde, veremos cambios insignia que darán la señal del cambio anunciado, de tal manera que, Enrique Etienne, sabe, aunque lo niegue, que tienen los días contados.

O dígame usted, ¿quién se ha mantenido como rector frente los embates de voluntad de un gobernador?